Mi primer refugio

El espacio propone una reflexión sobre los primeros vínculos: aquellos que conectan al niño con su entorno, su madre, su padre y la experiencia de habitar. Desde esta mirada, Mi primer refugio se construye como un universo análogo, dónde lectura, juego y calma conviven en equilibrio.

Un gran librero azul de líneas curvas abraza y organiza las actividades del niño. Su forma envolvente, junto con los tonos madera, crea una atmósfera cálida y contenida. En el centro la cuna se erige como el núcleo de este pequeño mundo.

Las texturas naturales —lino, algodón y terciopelo— junto con los materiales orgánicos aportan serenidad. Cada superficie invita al tacto, a descubrir el mundo a través de los sentidos. Mi primer refugio encarna el espíritu de Espacios que unen: un lugar donde diseño y afecto se entrelazan para acompañar los primeros años de vida