Guardianes de Memoria

Instalación Artística y Paisajística que llama a la conexión con la vida, con la naturaleza que nos rodea y con nuestra propia naturaleza.

En este laberinto creado por esculturas totémicas conteniendo una especie primitiva nos transporta a un pasado remoto lleno de misterio como símbolo de resistencia y capacidad de adaptación.

Testigos silenciosos de la evolución del mundo que nos rodea, en cada helecho se esconde una historia milenaria que nos conecta con nuestros antepasados y con la quietud inquebrantable ante los sucesos de la vida.

Ancianos de nuestra tierra que nos transportan a las profundidades del tiempo haciéndonos sentir tan efímeros como la vida de una fronda. Conectar con su historia es conectar con el equilibrio mágico que existe en la naturaleza y sentir su supervivencia por millones de años es sentir el fluir con la vida.

Guardianes de memorias que nos invitan a sentirnos parte de un todo, despertando nuestra conexión con los sentidos, con nuestras raíces y con nuestro presente.

Esta obra propone un espacio de desconexión para volver a conectar, un recorrido para hacer una pausa en la vida que nos lleve a ver la magia existente y en donde las vibraciones armónicas nos conduzcan a nuestro propio equilibrio natural.

MEMORIA CONSTRUCTIVA

Para hacer énfasis en el concepto principal de la obra, se optó por materializar el ambiente con materiales que nos remitan a la naturaleza para que el espectador se sienta dentro de un oasis natural.

El recorrido del espacio consta de dos sectores, hall de ingreso y salón principal.

En el primer sector se proyecta un acceso al espacio mediante una sucesión de listones de madera de Patagonia Flooring generando un recorrido laberíntico y al mismo tiempo de suspenso. El techo en este sector se materializa con madera Cork Terra de Patagonia Flooring.

En el segundo sector las paredes de la caja se revisten con madera Slim Panel Fusion color Tobacco de la línea de Patagonia Flooring, generando textura a los planos verticales.

Respecto al techo, se optó por generar y enfatizar un eje central materializado con placas Knauf, con una terminación en pintura Mate de Alba color Planicies Escocesas y en color Castillo de Arena para el resto del techo .

El eje central del techo cobra protagonismo al encontrarse y bajar en el muro materializándose en una raja aludiendo ser un amanecer; El muro central realizado con placas Knauf, se encuentra revestido en madera Cork Terra de Patagonia Flooring y listones Quadra Olivo de Atrim.

Respecto al revestimiento del piso se eligió un piso rústico con textura de piedra en color grisáceo,Granza Ivory Out de Vite.

El recorrido consta de una sucesión de esculturas totémicas realizadas por nuestro estudio en acero perforado con una textura nervada que simbolizan un altar para una especie de origen milenario.

El espacio es acompañado por un equipamiento de descanso, de pausa y contemplación por taburetes de acero texturado.

El recorrido se encuentra acompañado de un gran protagonismo de iluminación (artefactos Macroled) y sonido domotizado por Cedia.

El tacto con la materialidad de las diferentes texturas, el sonido diseñado especialmente para la obra, la  frescura de los aromas y el recorrido con su escenografía fueron pensadas con la intención de adentrar al espectador en la naturaleza misma. La idea primordial es generar un espacio en donde todos los sentidos sean un medio para sentir a nuestra madre tierra.